Una serie | Succession
Milagros Irastorza
«Ir más allá del padre a condición de servirse de él». Mi hermana psicoanalista me propone: «¿Querés entender esta frase de Lacan? Mirá Succession».
Un magnate norteamericano ya viejo y sus hijos compitiendo por sucederlo. Y para seguir parafraseando a mi hermana que siempre lo explica mejor: una sucesión implica un doble movimiento: que un padre pueda aceptar que va a morir y deje ese lugar a sus hijos, y que los hijos dejen de ser hijos.
Ir más allá del padre, matar simbólicamente al padre, dejar de estar bajo el ala paterna. Servirse de él no es renegar del padre, es con el padre, pero más allá de él.
Sobre esto trata Succession: un padre que no quiere dejar su lugar. Hijos que quieren ocupar el lugar del padre, pero sin dejar de ser hijos, sin correr riesgos y sin asumir costos.
Es una tragicomedia perfecta, tiene algo de drama griego o romano que recuerda al Saturno de Goya devorando a sus hijos, pero aquí sin esa mirada desquiciada, sino bien calculada y fría.
El humor ácido que trae alivio a la densidad de la trama, una banda sonora potente y un elenco impecable que logra que uno empatice con personajes miserables y muchas veces patéticos, pero de alguna manera casi queribles. No hay nadie bueno ni inocente en Succession, todos son seres mezquinos, ruines y egoístas que buscan destruirse, padres y hermanos sin el más mínimo rastro de amor, pero que sin embargo se sienten familia.
Una serie que es un lujo, inteligente e incómoda, que se distingue entre la enorme oferta de productos con fórmulas para atraer y agradar tantas veces vistas.
Ficha técnica
Título original Succession
Año 2018
País Estados Unidos
Reparto Brian Cox, Jeremy Strong, Sarah Snook, Kieran Culkin, Hiam Abbass, Alan Ruck, Nicholas Braun, Matthew Macfadyen
Dirección Jesse Armstrong (Creador), Adam McKay, entre otros
Guion Jesse Armstrong, Susan Soon He Stanton, Georgia Pritchett, entre otros
Música Nicholas Britell
Distribuidora HBO / Direct TV Go