Paisaje en la ciudad
Fabián de la Fuente
Es propósito de este número avanzar en el reconocimiento de los variados componentes que hacen a la constitución y construcción del Paisaje en la Ciudad, comprendiéndolo como una compleja y dinámica intersección de componentes, que en tensión y dispuestos en una línea de momentos configuran y reconfiguran de manera constante el escenario urbano; condicionando y habilitando en términos de presentes y futuros.
El Paisaje es resultado del acto de percibir el espacio y de allí, el discernimiento de lo presente y la valoración que como individuos realizamos del ambiente que nos rodea y al cual nos encontramos expuestos. En ello se impone una relación entre sujeto (agentes culturales) y objeto (escenas espaciales), articulados dialécticamente. Este intercambio resulta inestable y dinámico, con formalizaciones únicas (personales) donde cada sujeto produce una caracterización, una valoración propia frente a una determinada situación espacial y emocional. A la vez, el espacio como resultado de las acciones evolutivas y transformativas, se establece como un escenario cambiante y en constante proceso.
Ello como resultado de prácticas culturales que se desarrollan en el espacio, la incidencia del cambio climático (que encuentra en los territorios urbanos efectos de magnitud), los cambios tecnológicos, renovadas formas de producción, y de no menos consideración las migraciones de población.
La configuración actual del paisaje de nuestra Buenos Aires metropolitana es tan solo una imagen instantánea dentro de un proceso dinámico, del que estamos seguros que obedece al resultado de lo precedente pero de imprecisa previsibilidad prospectiva. A su vez, conocemos esta situación de manera parcial, debiendo integrar dimensiones disciplinares (sociales, ambientales, urbanísticas, infraestructurales, productivas, políticas, de regulación urbanística y ordenamiento territorial, de formas de gobierno) a modo de animarnos a descifrarla; un desafío crítico de orden interdisciplinar.
Una lectura superficial, le otorgaría a la ciudad una imagen de paisaje erróneamente estático de un sistema en plena transformación; contracción, expansión y desaparición, todo ello al mismo tiempo.
Una fragmentación regulatoria (un tramado metropolitano de intrajuridiccionalidades que participa de un único territorio continuo, pero compartimentado desde su gestión) promueve que ideales de ciudad con regulaciones urbanísticas locales apuesten a futuros ideales individuales.
En ello va implícito la promoción de valoraciones y objetivos a veces discordantes y descoordinados, con escasos o nulos acuerdos comunes, lo cual produce la construcción producción de un escenario aún más incierto, que cabe atender para cohesionar lineamientos comunes de ordenamiento producción y gestión territorial. Como resultado, la producción de una urbanidad acorde y paisajes urbanos y sostenibles en dimensiones sociales y ambientales.
Como actores con capacidad de incidencia en la producción urbana, debemos poseer un renovado conocimiento integral para analizar, actuar y posteriormente incidir positivamente en los procesos conformantes de ciudad.
¿Cuál será ese escenario que aún no conocemos, al cual debemos anticiparnos, para así orientar nuestras decisiones de actuación? ¿Qué capacidades disponemos como recursos para explorar renovadas prácticas urbanísticas, arquitectónicas y paisajísticas? ¿Cómo podremos contribuir desde nuestro hacer a generar ciudades más justas y equilibradas, paisajes urbanos acordes, posibles y perdurables? ¿Cuál es el rol crucial, invisible, del soporte ambiental que configura el paisaje y así la identidad y patrimonialidad urbana? ¿Cuáles son los factores que inciden en las valoraciones y percepciones en la ciudad; y cuál es su relación en la construcción, memoria y apropiación de valores comunes identitarios?
Paisaje en la Ciudad arriesga un intento de aproximación multidimensional, induciendo un recorrido por los textos donde se asistirá a visiones y cuestionamientos que contribuirán a la definición de un nuevo escenario de problematización de procesos de configuración territorial tal que nos permita repensar las formas de actuación y como resultado de ello, del Paisaje.
Al fin de establecer un abordaje integral que de cuenta de lo polisémico del Paisaje y de su aprehensión, reproduzco un orden (arbitrario) de los textos de los autores invitados dentro las categorías que emergen del tratado, De Architectura de Vitruvio, del siglo I a. C., confirmando desde lo disciplinar los tres principios esenciales que presente están en nuestro quehacer disciplinar: la Belleza (Venustas), la Firmeza (Firmitas) y la Utilidad (Utilitas). Esta ponderación de orden paralelo nos permitirá construir una valoración del Paisaje mencionando factores precisos y cuantificables. Desde una perspectiva integrada, una suma de miradas y opiniones que, desde el prisma disciplinar, se constituyen en contribuciones a renovadas estéticas urbanas con el objetivo de trazar imaginarios que, como tutores, guíen la construcción de nuestra metrópoli.